A propósito de paradojas


En su origen, el blog fue pensado como un diario personal público –interesante paradoja-, luego fue calando en internet convirtiéndose en cualquier cosa. Cualquier cosa resume la cantidad y variedad de blogs que se encuentran en la red. Evidentemente las puntocom y los portales han cedido espacio a las comunidades virtuales y a los personales blogs. 

Desde hace dos años que escribo estas crónicas repetidas. De julio 2007 a julio 2008 publiqué 17 entradas, el segundo año, 24; y en el último mes, he publicado seis post, lo que significa que estoy escribiendo cada vez más, aunque dudo que mejor. Lo cierto es que cuando digo la verdad los lectores no me creen, en cambio, sí juzgan toda la ficción.
Como dice mi abuela, “para muestra un botón”:

Mi novio ha amenazado con dejarme. Cree que, el que me besó una vez, no fue un grillo sino un chico; que cuando me llama por teléfono lo confundo con otra persona, que lo llevo de viaje con la excusa de ver a alguien más y que les escondo la mitad, por lo menos, de las cosas que hago.

Mi madre, está molesta. Me pregunta cuándo hice esto o aquello, por qué no lo sabe. Me culpa de la incredulidad de algunas de mis lectoras por mis relatos sobre historias de amor, en las que recaemos hasta el cansancio. Es como si me culpara por haberle dicho a mi hermana que San Nicolás no existe. Ruega a Dios por mí, preocupada por mi vida precipitada y sin sentido.

Algunas amigas se ofenden, creen que expongo al escarnio público secretos de estado, otras opinan que me he vuelto narcisista y vanidosa. Reencontré viejas amistades, pero algunas de las nuevas no me hablaron más. A veces, me siento como un político en campaña, ya no sé quien me cree y quién no.

Cuando escribo entradas que creo no van a gustar, recibo muchos comentarios, pero con relatos que siento que puedo ganar el Pulitzer, silencio total. Las reflexiones se convierten en burlas y las burlas en reflexiones de vida.

En general, mientras unos se molestan, ríen o lloran; yo, de este lado de la pantalla, sigo con mi ejercicio de escritura permanente. Veremos qué pasa en otro año, cuántas crónicas repetidas más se contarán.

2 comentarios:

Milagro Haack dijo...

Hola Adriana.
Lo inconcluso es uno de los ojos por donde lectores, realmente lectores pueden atrapar sólo un signo y de allí dejar alguna huella anudando ese hilo inconcluso desde el “otro” universo.
Lo otro: cuando uno charla en primera persona y está en el universo del “otro”, entonces, se es el "otro" y no el “yo” personal. Quizás, el ser humano tiende a fusionar ideas y llevarlo al plano subjetivo- anímico, a través de similitudes sensaciones experimentadas. Quizás, sea lo que me llevo de esta lectura y una frase que me es muy afín: escritura permanente. En lo personal, tengo blog desde el año 2005, que he alimentado poco a poco. No es fácil tener lectores, comentarios, por ello, algo atrae seguir, y eso, quizás, sea lo atractivo de crónicas repetidas.

Milagro Haack

Nota: no son consejos, son simple reflexiones.

Lisbeethoven dijo...

Hola Ché vecina:
Hoy pude comenzar a leerte. Desatiendo tu blogs, malhecho!!, no hay excusa. Pero tienes mucho para comer con los ojos y digerir con , ¿con qué? Con el razonamiento lógico?, el abstracto?, el sentimiento?, con qué cosa te digiero?...es paradoja porque con todo puedo o porque con todo quiero?.
Me parece que solo escribe...y déjate!, allá ellos...total, tú eres feliz.